Por Silvina Baldino
Su nombre suena fuerte en La Plata y más allá. Nicolás Erazun es bartender. Nació en La Pampa y en el año 2011 llegó a La Plata para estudiar y trabajar. Hasta hace unos días se desempeñaba como jefe de barra de Abruzzese. Hoy lo espera Buenos Aires con un nuevo desafío: celebrar la apertura de un bar.
“La primera vez en un bar de coctelería fue en Santa Rosa, en Siete 10 y Cine Club; dos bares que asesoraba Lucas López Dávalos, un referente de la coctelería de Buenos Aires”, cuenta Nico cuando le preguntamos sobre sus inicios, y descubrimos que su carrera comenzó casi de casualidad: “Yo estaba buscando algo para hacer temporada y metí a laburar con él, sin nada de experiencia. Luego, me vine a La Plata a estudiar (es Técnico Eviscerador, profe de Educación Física y acaba de iniciar la carrera de Medicina) pero siempre estuve aferrado a la coctelería”.
Fue jefe de barra de Cruel Barra & Morfi previo a la pandemia, cuando Gabriel Vallejos estaba al mando del bar. Luego pasó por Gran Galpón y en 2021 desembarcó Abruzzese donde se consolidó como profesional. Inquieto, curioso y atraído por los nuevos desafíos, Nico ha dejado huella en importantes competiciones, algunas de nivel internacional. En 2020, Nico Erazun llegó a la final del Bacardi Legacy representó a Argentina con su trago “Caos”. El año pasado fue semifinalista en el Word Class; viajó a España a representar a la Argentina en el Tío Pepe Challenge; y hasta se animó a las cámaras de TV y fue finalista del reality El Gran Bartender en Telefé.
Este año Nico está comenzando a transmitir su pasión desde otro rol con su flamante proyecto: el Centro de Formación de Bartenders, para aficionados o para quienes quieren desempeñarse detrás de una barra. Y hasta se animó a tomar nuevo rumbo. En pocos días desembarca en la ciudad de Buenos Aires con una interesante propuesta: El Legado, “un piano bar hermoso, muy parecido a lo que fue el Cruel de Gabi Vallejos”, dice. Pero para mantener su hermoso vínculo que supo construir con los platenses, el bartender tendrá un espacio en Miraflores, donde se lo podrá encontrar los domingos.
En un mano a mano con #Pinta, el nos cuenta sobre sus inicios, los concursos de coctelería y de lo nuevo que se viene. Además, nos revela algunas preferencias de la coctelería.
– ¿Qué te gusta de La Plata que has logrado afinidad?
La Plata me dio una vida nueva. Vine, me puse a estudiar y siempre aferrado a la coctelería. En los 12 años jamás estuve sin trabajar en la coctelería. A quienes venimos del interior nos es muy difícil lograr grandes metas. Y a mí La Plata me dio eso, me permitió estar cerca de personas que me ayudaron a cumplir sueños.
– ¿Quién fue tu gran maestro?
Grandes maestros tuve muchos. Pero a quienes destaco es a Lucas Lopez Dávalos, quien me enseñó todo el mundillo de la coctelería. El ámbito de la gastronomía es tan amplio que uno va aprendiendo y creciendo de distintas maneras, adaptándose al lugar que te toque trabajar. Pasado cierto tiempo, luego de haber tenido varias experiencias se puede identificar quiénes realmente tuvieron algo que ver tu formación, en tu forma de ser, en tu manera de trabajar… Y sin dudas mi gran maestro en la coctelería fue Dávalos, pero mi maestro en la gastronomía fue Gabriel Vallejos.
– Ganaste el Bacardi Legacy 2020 con “Caos” ¿Qué significa este coctel en tu vida?
Caos fue el trampolín. No solamente para mí, sino para toda la coctelería platense. Siempre tuvimos buenos bartenders en la ciudad. Bacardi Legacy me dio mucha visibilidad; se pudo apreciar todo el trabajo que veníamos haciendo desde hacía mucho en la Plata, y a la vez conmigo se dieron a conocer muchos colegas que aparecieron para conocer el circulo cerrado de coctelería.
Sabemos que en Argentina la gran mayoría de los bartenders reconocidos están en CABA. Llegar con “Caos” fue un quiebre para la coctelería porque de repente que una persona del interior absolutamente desconocida gane el Bacardi Legacy fue novedoso; y creo que resultó un motivo para que el resto de los colegas empiecen a confiar en las competencias, porque realmente existe cierto prejuicio. Pero lo importante fue que dio un gran salto y se abrió una puerta a La Plata, y ya desde CABA nos empiezan a mirar: ‘En La Plata hay bartenders, y hay bartenders que hacen cosas buenas eh’.
– ¿Qué te atrae de las competencias?
Todas las competencias son diferentes y de todas se aprende. La primera fue en La Plata, quedé tercero y me ganó un alumno de un curso que estaba dando imagínate (risas). Me atrae la adrenalina, el compartir, el conocer gente… Mi primera gran competencia fue el Bacardi Legacy, y allí conocí gente que leía en los diarios o en los libros. Y dije, pucha … esto me está gustando, suena interesante. Y ya en la segunda competencia me decían a mí: ‘Nico, nos podemos sacar una foto?’, personas me veían a mí como yo a otros en la competencia anterior. Esa retro alimentación de conocer gente es lo que me gusta; lo que me escribe la gente en las redes sociales… el feedback con la gente me atrae, además de que también en las competencias aprendés de los demás.
– Pasaste por las barras más importantes de La Plata. Ahora te espera un nuevo proyecto en CABA, con la apertura de un bar ¿Cómo estás viviendo este desafío?
Desde hacía un tiempo tenia ganas de probar en Capital, pero yo estaba muy cómodo en la ciudad con un proyecto como Abruzzese, donde había un interesante desafío: desarrollar la coctelería en un restaurante tradicional de la ciudad. Pero me llega una propuesta muy interesante y cuando fui a la entrevista pude confirmarlo. Un piano bar en el barrio de Retiro; se llama Legado y tiene un parecido al Cruel de su momento, cuando Gabi era dueño.
Estoy muy ansioso por conocer a la gente de Capital. Si bien siempre me recibieron de la mejor manera, ahora estar establecido en un bar y llevarlo adelante va a ser un desafío muy lindo, y va a ser especial porque estaré compartiendo la barra con mi sobrino de 21 años que vino de La Pampa (Agustin Cabral). Siento que se van repitiendo historias… El Legado va a ser un desafío hermoso por muchas cosas, por ver crecer a mi sobrino, por llevar adelante un lugar y a la vez seguir creciendo yo en lo profesional porque quiero que Capital sea un nuevo trampolín en mi carrera gastronómica.
– Pero tu vínculo con los platenses seguirá estando… Contanos de tu propuesta en Miraflores
Nunca perdí la comunicación con Gabi Vallejos. Siempre dijimos de volver a hacer algo juntos. Cuando creí que le ponía punto final a mi paso por La Plata, me puse a pensar… yo doy talleres de coctelería los domingos en La Plata y tengo franco ese día… por qué no llevarle una propuesta a Gabi para volver a relacionarnos. Le escribi, nos reunimos y en 2 horas teníamos armada una propuesta increíble.
Y la cosa es así. Los domingos a las 16 horas voy a estar ofreciendo clases de coctelería. A su término, música, comida rica y fiestita de cócteles. Y lo vivo como un sueño. Lo que parecía ser el fin de mi paso por La Plata terminó siendo el comienzo de algo nuevo con algo que siempre quise hacer, volver a hacer algo con Gabi.
– Me siento en la barra … ¿qué trago me vas a recomendás?
Cuando alguien se sienta en la barra, me gusta indagar apenitas y evaluar el estado de ánimo, cómo se siente… por supuesto siempre y cuando la persona lo permita. Creo que es parte de nuestro trabajo, hacerle pasar a alguien un buen momento. Y si bien no existe un coctel perfecto para cada momento, yo creo que hay algunos que no fallan y que suelen ser los que te dan la apertura a un montón de cosas. A toda persona que se sienta en la barra yo le ofrezco un vermú, porque soy amante del vermú y porque no hay manera de que esa persona empiece mal una comida o una estadía en la barra sin un vermú.
– ¿Hacemos un ping pong?
Copa preferida: Copa Coupe
Destilado fetiche: Bourbon
¿Coctel cítrico o dulce? citrico
No falta en tu barra: orden
¿Coctelera o método directo? Coctelera siempre
