Por Silvina Baldino
Iban al colegio juntos. Fueron novios y ahora son amigos y socios. Sofía Peluso y Sebastián Nogueira tenían 17 años cuando en pleno ciclo lectivo decidieron emprender un negocio gastronómico. “Era la casa de mi abuela, luego pasó a ser mi dormitorio y terminó en una heladería” comienza Sofia, quien con 17 años sintió la necesidad de emprender por fuera del proyecto familiar (Panadería Peluso). “En principio pensamos en una pizzería, pero aprovechando que mi hermano tenía 2 freezers sin usar nos decantamos por el mundo del helado”.
Fue así como comenzaron a refaccionar ese espacio de la casa familiar para montar el local. “Reciclamos aberturas y muebles viejas, construimos un mostrador con pallets… ; los fines de semana recorríamos plazas y parques de la ciudad vendiendo bolas de fraile y pochoclos para solventar los gastos”, agrega Sebastián.
En noviembre de 2019 abrieron la heladería. Por entonces bajo el nombre “Mozzafiato”, con la venta de helados que les traía un reconocido proveedor (La Sorbetiere). Pero con el paso del tiempo (pandemia mediante) sintieron que debían dar un paso más. La necesidad de querer crear algo único, y entender el proceso de elaboración del helado artesanal los llevó a plantearse el desafío de fabricar su propio helado.
Fueron a Carpiargento, representantes locales de la firma Carpigiani (la reconocida marca italiana especializada en máquinas de elaboración de helados), quienes los acompañaron y capacitaron en el mundo del helado artesanal, siendo sus clientes más jovenes en comenzar un proyecto.
La familia Carpiargento los impulsó. “En diciembre tienen que salir los helados, nos dijeron…. nos parecía imposible cambiar la carta de sabores en sólo 3 meses, ¡formular y balancear una receta nos parecía un chino básico!“. Pero lo lograron; pudieron capitalizar todos ese conocimiento y a fines de 2022 comenzaron a vender su propio helado. “Meterse a fabricar es parte de un mundo lleno de posibilidades y sabores”.
“Nos propusimos tener un buen dulce de leche y un buen chocolate para comenzar. Luego llegaría el tiempo para formular otras cremas helados”. “Pasamos por aproximadamente 15 recetas de dulce de leche hasta dar con el sabor que queríamos”.
El primer sabor que lanzaron fue Fior Di Latte, un sabor similar a la crema americana pero sin esencias. “Lleva sólo leche y crema de leche”, acota el joven y agrega: “Nos costó mucho venderlo porque el público no está acostumbrado a a cremas sin esencias avainilladas. Lo mismo pasó con el helado de Frutilla a la Crema, al utilizar frutas naturales no llegábamos a la intensidad de lo que está acostumbrado el público como cuando se utiliza esencias”.
Luego vino Sinfonía Citrica, que está en carta sólo cuando la fruta es temporada (un blend de citricos como naranja, mandarina y limón) que de acuerdo a cómo está la fruta va cambiando el sabor. “Eso es el plus del helado artesanal, si bien está bastante estandarizado, el utilizar frutas frescas permite obtener una presencia de la fruta de manera diferente en sabor” expresa Sofi, a lo que agrega: “También hicimos el de vainilla con chaucha de vainilla y luego vino el Chocolate, similar al 70% cacao que tenemos ahora”.
Hoy a MOOD la encontramos en un punto neurálgico de la ciudad: 1 y 60. Detrás de una enorme vidriera con un cartel celeste que dice simplemente MOOD se esconde una pequeña heladería artesanal que ha logrado cautivar a los vecinos y transeúntes.
En carta hay 38 sabores. Los chicos elaboran helado todos los días. Materia prima de calidad, algo que no se negocia. Seba es fanático del Sambayon y se enorgullece de tener ese sabor. “Yema. crema de leche, azúcar y vino Marsala, nada más”.
Lemon Pie, Tarta de Coco con crema de masa sableé sembrada con dulce de leche y coco, entre los sabores originales. El dulce de leche Marquise es el más vendido; es una base de helado de dulce de leche San Ignacio y merengue suizo. Dulce de Leche Colonial elaborado con el Colonial de La Serenísima. Entre las creaciones de la casa está Chocolate Lemon Cookies, una base de helado de chocolate con galletitas de limón y crema de limón.
Para esta temporada de Fiestas los chicos lanzaron el sabor “Pan Dulce”,una base de leche infusionada 48 hs. en pan dulce y sembrada con frutas abrillantadas, pasas de uva, nueces y almendras tostadas.
Detrás de esta heladería hay mentes inquietas y cuerpos inquietos. Para el Dia de la Tradición elaboraron el sabor Alfajor de Maicena y convocaron al público a degustarlo. “Para nosotros el helado siempre acompaña un momento, una anéctdota, un recuerdo lindo con algún familiar o amigo… es por eso que uno de nuestros focos es colaborar a crear nuevos momentos, acompañados con una atención personalizada y de un buen helado artesanal elaborado con leche fresca y materias primas de priera calidad” , puntualizaron.
MOOD
Dónde: Diag. 79 e/ 1 y 2 , La Plata
Ruta 11 y 97 (local y fábrica)
En Instagram: @moodhelados
