Por Silvina Baldino
“Queremos que vivas una experiencia distinta alrededor de la coctelería”. Así, en las redes sociales, el reconocido bartender Gon Cabado y su compañera Aldana Gayoso explican el espíritu detrás de su nuevo proyecto: Festín, una barra nómade que, una o dos noches al mes, ocupa un restaurante en la ciudad con una propuesta de tragos pensada y coordinada con el chef del lugar para un maridaje perfecto.
Lo interesante de Festín es que sirve para ilustrar lo que viene sucediendo con fuerza este último tiempo en la ciudad, con propuestas que invitan a generar experiencias gastronómicas únicas. “La idea de hacer Festín fue de Aldi. Yo soy de los que frenan los proyectos, pero ella es la que avanza”, dice de manera simpática el bartender, quien se convenció de que era posible hacerlo porque además, nunca faltaron las ganas de tener un proyecto en común. “Queremos generar experiencias gastronómicas nuevas, yo desde el lado de anfitriona aportando calidez y algo distinto (Aldana es quien recibe a los comensales y les explica cada paso de la carta), y Gon aportando creatividad detrás de la barra”, dice Aldana. “La idea también es empezar a tener estas noches para disfrutar, más allá de nuestra labor¨, agrega Gon.
Moro Finca y Fonda fue el primer spot elegido para Festín. Allí se vio reflejado el espíritu del proyecto que llevan a cabo esta pareja emprendedora. La búsqueda de sabores remitían a una gastronomía como la de este restaurante, con recetas como gin, pomelo rosado, almíbar de melaleuca, tónica, perfume de pimienta rosa; o el trago con whiskey, jugo de manzana roja, shrub de membrillo y jengibre. “La idea de Gon era que yo armase un menú en base a la identidad de Moro, a la cocina que hacemos acá” dice el cocinero Santi Palma, que se desempeña como chef del lugar.
Por estos tiempos los tragos ya no se identifican solamente con la vida nocturna, sino que empiezan a relacionarse con la gastronomía. Los restaurantes más prestigiosos han incorporado barras de cócteles y los bares, en general, sofisticaron sus cartas de comida. “La gente no está acostumbrada a comer con tragos y lo de Festín es una buena movida”, dice Santi Palma y agrega: “la coctelería es una buena opción para acompañar una comida. El trago es una bebida muy versátil y va con cualquier tipo de tentempié”.
Un festín de sabores
Cabado y Palma trabajaron en conjunto para que el maridaje del primer Festín sea perfecto. La bienvenida tuvo como protagonista a Lunfa. El trago se denominó Susto! y estaba compuesto por Vermú Lunfa rosado macerado con olivas negras y gasificado. Como tapa, Snack de frutos secos y pecorino. Un segundo paso nos encontramos con el Gin Tonic Del Árbol (gin Gordon’s, pomelo rosado, almíbar de melaleuca (árbol de té), tónica, perfume de pimienta rosa). Para acompañar, Crocante de mejillones, espinacas y ragout de molleja. Entre paso y paso la regla de oro de un buen bartender: vaso de agua por cada vaso de alcohol.
El momento más esperado llegó con el plato principal: Ossobuco, kabutia y vegetales de estación. Una fusión de sabores exquisita. Para maridar, Gon Cabado preparó Caudillo: Vodka Smirnoff de zanahoria, jugo de limones quemados, miel de salvia, clara de huevo y aceite de limón. Por último, llegó el postre: una deliciosa combinación de Batatas confitadas, chocolate blanco y queso fresco. Para acompañar, y darle el cierre final a esta noche, desde la barra llegó No Seas Vigilante! con Johnnie Walker Red Label, jugo de manzana roja, shrub de membrillo y jengibre. Sublime.
Esta nueva propuesta a la que bautizaron “Festín” atrapa al comensal de principio a fin. Los expertos en la cocina y la coctelería lograron un juego equilibrado y único entre lo visual, el ambiente, los aromas y la fusión de sabores. La ruta de esta barra sigue en algún lugar de la ciudad, siempre con el deseo de lograr transmitir los sabores y la identidad de un espacio a través de la gastronomía y la coctelería.
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Festín – barra nómade-
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