Por Silvina Baldino
Cuando te hablan de un pueblo, San Antonio de Areco está en boca de todos. No sólo por la manera en que sus habitantes honran al gaucho argentino sino por la infinidad de propuestas para pasar unos días de campo y no aburrirse. Sus construcciones antiguas, sus plazas, el río, el Museo Ricardo Güiraldes hacen de esta localidad.un destino perfecto para explorar. Hace un par de semanas nos hicimos una escapada para ver qué hay de nuevo, para ofrecerles las mejores propuestas para quienes deciden hacerse una escapada este invierno.
▸ La plaza principal y alrededores
Ruiz de Arellano es el nombre de la plaza principal de San Antonio de Areco, frente al Edificio Municipal, la iglesia San Antonio de Padua y otros importantes edificios. En el año 1750 Ruiz de Arellano, fundador del pueblo, donó parte de sus tierras a la iglesia y una de esas manzanas fue reservada para la plaza pública.
En la Plaza se encuentra un Monumento a Juan Hipólito Vieytes nacido en San Antonio de Areco, 6 de agosto de 1762 que fue un comerciante, militar y político argentino que tuvo un importante papel en la Revolución de Mayo de 1810. Un puestito de la oficina de Turismo con información de todos los eventos del fin de semana.
▸ Museo Las Lilas
El gaucho es la figura que representa a San Antonio de Areco, también llamada “Cuna de la Tradición”, y se hace presente de diferentes maneras. Una de ellas en el Museo Ricardo Güiraldes, ubicado en las afueras de la ciudad y al que no pudimos acceder porque fue afectado por la inundación de mayo último, y el Museo Las Lilas, ubicado en un bellísimo edificio del casco histórico. Este museo presenta una valiosa selección de obras originales del conocido y popular artista don Florencio Molina Campos (1891-1959).
Acuarelas, pasteles y témperas que abarcan sus diferentes etapas artísticas, junto con afiches publicitarios, chapas y algunos objetos personales componen el patrimonio artístico y cultural que se exhibe al público. También hay salas con exposiciones temporales. En este momento está la obra de Luis J. Medrano, con témperas realizadas para ilustrar los almanaques de la Fábrica Argentina de Alpargatas de los años 1946 y 1947 editados en Uruguay y Argentina. Hay auditorio, una cafetería y un espacio con 5 obras de Molina Campos recreadas por Fernando Pugliese cobran vida a través de la voz de Luis Landriscina, quien relata las andanzas del paisano Tiléforo Areco, basándose en textos escritos por el pintor. IG: @museolaslilas
▸ Laberinto Pampa
Está ubicado dentro de Estancia La Cinacina. Realizado con más de diez especies de bambú Laberinto pampa propone dos recorridos inspirados en los diseños tradicionales de la platería criolla característica del territorio donde está emplazado. Son ocho circuitos y un centro que invita a perderse para encontrar lo que nos estamos perdiendo en ese mágico lugar. “El recorrido tiene el poder de devolvernos a la belleza del planeta, de reconectarnos con la naturaleza para encontrar aquel lugar que hemos perdido dentro de su trama”, dicen sus dueños. IG: @laberintopampa
▸ Boliche de Bessonart
No estuviste en San Antonio de Areco si no pasaste por el Boliche de Bessonart, un histórico almacén de ramos generales con la particularidad de tener su fachada torcida. El edificio estuvo a punto de ser demolido, pero uno de los herederos lo pudo rescatar. En el lugar se sirven picadas, ensaladas y unas riquísimas empanadas caseras, donde se recomienda especialmente las de cordero cortada a cuchillo. El lugar, que es centro de reunión de los arequeros, tiene una particularidad: la preparación del Fernet es con Pepsi. En el patio, en el salón o en la vereda, sentarse en Bessonart es llegar a las raíces del pueblo.
Boliche de Bessonart, un tradicional.
▸ Lo de Tito
Un lugar que te transporta a otros tiempos. Su ambientación está repleta de recuerdos con objetos en desuso y fotos de antaño. Es una pulpería atendida por sus dueños, quienes te hacen sentir como en casa. Platos de bodegón, todo casero y abundante. El Churrasqueando es es uno de los favoritos de la carta. Es un bife de chorizo fileteado que viene con jamon, queso, lechuga, tomate huevo y papas fritas. También las pastas. En IG: @pulperialodetito
▸ Colorado
Ignacio Ortiz de Rosas es chef. En su restaurante Colorado imprime su personalidad con platos de cocina de autor de su recorrido por el mundo. Es algo distinto a lo que se suele encontrar en la escena gastronómica arequera. Platos simples pero con una vuelta de turca que aplica el chef con técnica. Desde pesca curada, gyozas y terrinz de foi hasta risotto, chow mien, ravioles de hongos, arroz crocante, ribs de cerdo con BBQ. Los panificados de masa madre elaborados en el lugar son un destacado imperdible. Y el lugar es moderno y con una ambientación exquisita. En IG: @coloradodeareco
▸ Santo Cafe
Es una de las novedades de este año. Un café oculto con una capilla en el patio principal resulta el lugar perfecto para un desayuno, un almuerzo o la merienda. La Capilla San Lucas había sido construida en el patio de la casa de un vecino de Areco muy devoto; y siempre había permanecido oculta. Hace unos meses se montó una cafetería y hoy el esplendor de la capilla deja maravillados a todos. Detrás de esta propuesta están dos chicas, Martina y Maria. Hay ricas opciones de pastelería, pancakes, bowls de yogur y fruta, croissants (incluso uno vegano), sándwiches, ensaladas, croissants rellenos y pizza. Y sentarse en el patio es como sentirse en un pueblito de Italia, con el limonero en el centro de escena y la capilla. IG: @santocafeareco_
Santo Café.
▸ Café Pueblo
Abrió hace muy poquitos días. Una cafetería inmersa en una tienda deco. Está ubicada en el hotel La Florida, frente a Plaza Gomez. Café del bueno, delicias de pastelería y un ambiente relajado e íntimo. Abierto en horario corrido (de 8 a 19 h), por lo que también se puede disfrutar de un almuerzo (sandwiches, ensaladas). La carrot cake con nueves y el alfajor sablee de almendras y dulce leche, entre los favoritos del público. En IG: @cafepueblo
▸ Corazonada
Es el espacio gourmet de la cocinera Paula Méndez Carreras, quien reformó una vieja casona para montar un restaurante con su esencia. La propuesta es diferente al resto: platos a base de flores comestibles, con acento en los productos de estación. El menú ofrece cuatro entradas, platos principales y postres, de los que se puede combinar para realizar dos o tres pasos. Además de estar abierto como restaurante, la chef aprovecha un generoso espacio para dar clases de cocina. En IG: @corazonada.deareco
▸ El río
Un paseo por el río es otro de los imprescindibles de Areco. Caminar por el viejo puente de color rosa (construido en 1857) mencionado en el primer párrafo de Don Segundo Sombra, la obra máxima de Ricardo Güiraldes, quien lo describe poéticamente: «En las afueras del pueblo, a unas diez cuadras de la plaza céntrica, el puente viejo tiende su arco sobre el río, uniendo las quintas al campo tranquilo». Un buen plan es tirarse en una lonita a tomar unos mates a orilla del río. Enfrente está Obrador de Areco (@obradordeareco), una panadería artesanal donde podés comprar laminados, pastelitos y torta frita recién hecha. En la margen izquierda del río, a trescientos metros campo adentro estaba la pulpería La Blanqueada, lugar de aprovisionamiento doméstico y ocio del paisanaje. Los fines de semana hay una feria de artesanías de los locales.
Para comer, los lugareños también nos recomiendan: Almacen de Ramos Generales y Rossita. Para comparar alfajores: La Olla de Cobre.
▸ Dónde dormir
· Casa Bora
Un hotel boutique sólo para adultos que ofrece una ambientación exquisita. Son 4 exclusivas y espaciosas habitaciones equipadas con frigobar y además café nespresso de cortesía. El lugar es atendido por sus dueños y se destaca por la comodidad y diseño de cada habitación. Cada detalle fue pensado para que la estadía del huésped sea a puro relax. En IG: @casaborahotel.
Casa Bora
· La Florida – Casa Pueblo
Frente a Plaza Gomez está La Florida, un pequeño hotel construido en una casona de fin de siglo XIX. La posada es atendida por sus dueños y cuenta con 4 amplias habitaciones, jardín, piscina y zoom. Los desayunos se sirven el el nuevo Café Pueblo, situado en el mismo edificio. La posada se diseñó sobre una antigua casa de pueblo refaccionada y amoblada con diseño propio. En IG: @laflorida_casapueblo
La Florida – Casa Pueblo, frente a Plaza Gomez.