Por Silvina Baldino
Son pocos los espacios gastronómicos que honran el bagaje cultural de la auténtica cocina japonesa. Desde hace 5 años, Kuda Sushi brinda un viaje del paladar por los sabores del sol naciente. En este lugar de culto de City Bell, Edgar Kuda propone un cita singular: platos de la cocina nipona que formen parte de una verdadera experiencia lúdica y sensorial.
En Kuda Sushi cada detalle es pensado y hace a la experiencia. Desde la recepción se puede percibir todo lo que se hierve, fríe o pasa por la plancha; además de verificar la calidad de los ingredientes y el cuidado con que se les maneja. Una vez allí, tenés la opción de elegir subir al entrepiso (con la estética de cualquier otro restaurante) o pasar al salón contiguo en la planta baja, un espacio zen: cuatro mesas dentro de unos habitáculos de madera donde se come sentados sobre almohadones y, descalzos. Con palillos, o sin ellos.
En la cocina, el reconocido chef -descendiente de japoneses- pone a prueba en este lugar su creatividad en lo que es la cocina de inspiración étnica, con una impronta de autor y una propuesta llena de sutilezas. Kuda apuesta a platos poniendo hacen énfasis en el pescado, aunque también se utilizan otros productos con influencia asiática.
Antes de degustar los platos, pueden deleitar sus ojos con una decoración de tonos cálidos y luces bajas. La carta ofrece una variedad importante de rolls: entre los más populares está el Smoke (con langostinos, palta, queso crema envuelto en salmón ahumado), el Sweet Mango (con langostinos, palta, queso, envuelto en mango, azúcar mascabo y mix de semillas tostadas), y el roll caliente Asato (salmón, verdeo, rebozados en shallots, panko y salsa sweet chilli).
En Kudasushi también sirven algunos platos japoneses como gyoza (empanaditas de cerdo al vapor, selladas en la plancha), bao (s andwich de pan al vapor con panceta braseada, pickles y cilantro), tempura, nigiri, ceviches y tiraditos como el Shiromi que está elaborado con la pesca del día. Los comensales también pueden optar por un menú Omakase, y “ponerse en las manos del chef” para sorprenderse.
Nosotros optamos por platos más tradicionales. Probamos el tan preciado Yakisoba, un salteado de fideos de harina sarraceno con langostinos y salsa de ostras. Y también le dimos un regalo al paladar con Seafood, un plato con frutos de mar y vegetales salteados, leche de coco y arroz blanco. Para acompañar elegimos un torrontés dulce de Amalaya, entre tanta opción de etiquetas que presenta la carta.
Por último, la carta de postres. Vale la pena dejarse un lugar para probar alguna de las delicias golosas. Volcán, el clásico volcán de chocolate con salsa de frutos rojos, sake y helado de anko vuelve loco a cualquiera. Pero saborear Ioonashi, una pera pocheada en sake, yokan y crema de té verde fue el el a tanta fusión de sabores. Completan la carta bebidas como Umeshu o Sake o alguna infusión sin alcohol como
Kuda Sushi es una perlita de City Bell que no hay que dejar de visitar. Su cocina es amable al paladar y poco invasiva para quien no está acostumbrado a los sabores y texturas asiáticas. Un viaje intenso a Japón con autenticidades culinarias y hábitos culturales.
Kuda Sushi
Cuándo: martes a domingo de 19 a 23.45 hs.
Dónde: 472 nº 1426 e/ 20 y 21, City Bell
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