Por Silvina Baldino
Cada vez más los espacios gastronómicos que apuestan al vino como protagonista de los encuentros entre amigos. Los winebars son tendencia y se presentan como una alternativa a las cervecerías artesanales. En La Plata un nuevo point (barrial) para una salida en pareja o con amigos: Concreto, un lugar donde no se habla de Ipa, stout, irish o blonde, sino de blancos, rosados, naranjos, tintos ligeros o tintos intensos.
El proyecto nace de 4 amigos apasionados por el vino: los hermanos Fausto y Lautaro, Santiago (primo de ambos) y Franco. “La historia comienza hace unos años atrás cuando Lautaro comienza la carrera de sommelier”, nos cuenta Santiago. “De a poco nos fuimos involucrando con el mundo del vino y siempre nos juntábamos en alguna casa porque en La Plata no había un lugar como Concreto. Por eso comenzamos a pensar en este proyecto a la medida de lo que nosotros queríamos, donde el vino sea el protagonista. Es por eso que hace 6 meses comenzamos a darle forma a Concreto”.
Los jóvenes siempre estuvieron convencidos de que el vino necesitaba un maridaje. Es por eso que convocaron a Manuel Casinos como jefe de cocina; para que el menú combine y se complemente a la perfección con los vinos. Así surge Concreto. “El nombre del lugar nace a partir de un juego de palabras entre una manera de vinificar que es tendencia: huevos de concreto (hormigón), donde el vino toma un carácter frutal, y lo que nosotros queremos plantear en este lugar: algo simple, concreto, sin demasiadas vueltas”, explica Santiago.
Otra de los puntos importantes a trabajar fue la ambientación. “Quisimos romper con los colores oscuros y tonos madera que se les atribuye al vino. Por eso pensamos en dos colores jóvenes: el rosa y el celeste”, dice Santiago porque la idea es que la gente venga, se sienta tranqui y disfrute de un rico vino. Y si quiere saber más, estamos nosotros para explicarles”.
Lautaro, Fausto y Santiago son los encargados de seleccionar las etiquetas. “Siempre estamos probando vinos nuevos porque los enólogos están constantemente creando Probamos los vinos antes de ponerlos en la estantería, y son vinos con historia, porque así lo comunican los enólogos que elegimos, todos ellos muy reconocidos en el ámbito, ya sea porque vienen de familia hacedores de vinos o que han trabajado en bodegas grandes y decidieron tomar su propio camino”.
En los últimos tiempos, enólogos y sommeliers están trabajando en productos donde se les resta protagonismo a la madera en pos de lograr vinos más desnudos y de mayor pureza. “Como fanáticos del vino seguimos las últimas tendencias, y es por eso que queremos ofrecer vinos donde tiene preponderancia la fruta, como la ciruela en un Malbec, el durazno y el melón en los vinos blancos… vinos que tengan una historia para contar, que la podemos encontrar en las etiquetas o que nosotros mismos las podemos contar”. De todos modos, la carta de Concreto también dispone de vinos de barrica.
En Concreto hay mucho vinito para compartir. Podés elegir vino en botella o por copa. “Dentro de una botella hay más que una uva en particular, cada botella cuenta una historia”, dicen en el lugar. Hay una carta de bebidas donde podés seleccionar diferentes etiquetas de acuerdo a lo que quieras tomar: Tintos ligeros, Tintos medios, tintos intensos, Blancos, Rosados, Naranjos y Espumantes. Y también una frapera en la barra con las distintas opciones del día escritas en pizarra. El atractivo está en tomar vino por copa para poder ir probando y degustando distintas cepas y sabores. Para quienes no quieran vino, hay gaseosas, agua, cerveza, gin, vermú y whisky.
La propuesta gastronómica está a la altura, con platitos para un tapeo como Bruschetta de mortadela con pistacho y huevo duro, Tortilla de papa con salame de campo y huevo, La Provo (con morrón, cebolla y pesto), Buñuelos de acelga con alioli, Albondiguitas con escapas de parmesano y una salsita, Brie bruleé con reducción de salsa agridulce frutos secos y hojas verdes, entre otros. También hay tablitas de quesos y de fiambres, pizzas y opciones más contundentes como los sandwiches, entre los que se destacan el de Pastrón (con mostaza, pepinillos agridulces y rúcula), y el Pulled Pork con queso fundido. También hay propuesta Veggie. Para después de comer, variedad de postres en formato shot (Chocotorta, Tiramisú, Óreo cake, Lemon pie) y café.
Concreto presume ser el primer bar wine platense. Es atendido por sus dueños, quienes están pendientes de todos los detalles. Tiene veredita, un salón con mesas bajas, mesa alta, una barra, una estantería con botellas seleccionadas para que puedas llevarte a tu casa, y una estética entre retro y moderna, que incluye un cartel rosa de neón que ya es un emblema del lugar: la frase “Tomamos vinito o ké?”. Pronto inauguran la terraza.
Concreto
Dónde: 58 e/ 18 y 19
de jueves a domingos a partir de las 19.30 a 00 hs
En Instagram: @concretowinebar
Fotos: @ola_redcreativa / Vir Ucar / Pinta Mag