“Es un espectáculo que me cuesta definirlo qué es, no es un concierto de rock, tampoco es una obra de teatro”, le dice a #Pinta el cantante, guitarrista y tecladista Pablo Sbaraglia que interpreta la obra El Increíble Magnetismo del Gran Hotel Glamour Shuffle (así se llama su tercer disco) junto a su hermano Leonardo. Para esta propuesta, con la que se presentará en El Teatro Bar de La Plata este sábado, Pablo sumó al grupo a su hermano actor para interpretar pequeñas escenas teatrales que construyen un hilo argumental que hilvana a las canciones.
– ¿Es la primera vez que se visitan La Plata?
Sí, es la primera vez. La verdad es que tengo muchas ganas porque es una ciudad con una cultura muy influyente, la verdad es que va a estar bueno estar allá.
– ¿Con qué se va a encontrar el público?
Es un espectáculo que me cuesta definirlo qué es, no es un concierto de rock, tampoco es una obra de teatro. La idea es contar la historia de un pasajero que llega a este Hotel, que es raro… por momentos sobrenatural, con facilidades extrañas como un salón de pipas o una enfermería, y hacerlo de una manera menos tradicional, ir mezclando las dos cosas: el teatro y lo musical. Esto ya estaba planteado desde la concepción del disco, porque desde un principio fue pensado así. La idea es que se pueda entender la historia desde la primera canción hasta la última.
– Entonces, con cada canción es como que se va narrando una historia…
En realidad es una presentación de lo que es el disco que lancé en el 2014. Todo esto ya estaba escrito, esta historia estaba propuesta y la idea era contarla a través de las canciones, de la impronta y la energía de las letras como una información extra, y terminar de redondear el cuento con pequeños textos, incluyendo descripciones y pequeñas escenas de teatro con diálogo, uno por cada canción.
– Apostando a que es un show distinto. ¿Cómo lo recibe el público?
La gente se va muy contenta, la verdad es q lo recibe muy amablemente. Todos los comentarios siempre son elogiosos, divertidos, y ayudan. Ves como todo el público está totalmente concentrado y por un momento están todos riéndose o participando. La verdad es que está muy bien recibido, y nos pone muy contentos. 
– ¿Da lugar a la improvisación?
Sí.. hay mucho de eso. Obviamente que el espectáculo está guionado, está pensado, tiene su puesta de luces, su puesta de todo. Pero siempre sale algo, una mirada, una acotación, o interrumpir en alguna situación, pero con la tranquilidad de que está apoyado de un guión.
– Hace un tiempo que están con este espectáculo ¿Le fueron incorporando cambios? Sin ir más lejos en un momento los textos eran en off…
En realidad, cuando se presentó oficialmente el disco en formato de b anda, me pareció que era importante que tuvieran esos textos. La playlist del vivo respetó el orden del disco para que se siga el relato. En un primer momento los hicimos grabado, es decir, locutado con texto, en off. Y después, decidimos darle vida a estos textos. De ahí a pasarlo a carne y hueso con Leo fue un pasito nomás. Se nos ocurrió esa idea, y surgió así este espectáculo. Pero siempre con Leo y la b anda, buscamos mejorar el espectáculo.
– Una forma de acompañar las distintas situaciones que atraviesa este pasajero del hotel, con cada canción…
Claro, me parecía que necesitaba un apuntalamiento por parte de esos textos. Lo que hace Leo suma mucho más, porque interpreta varios personajes como el pasajero y algunas otras pequeñas cositas. Todo muy sutil, nada demasiado extenso.
– Por último, ¿Cómo es trabajar con tu hermano?
Está bueno primero porque nos conocemos mucho, y me da mucha confianza para poder improvisar. Esto hace que sea muy sencillo saber cuándo es oportuno meterse, interrumpir, decir algo fuera de guión, o cuándo no.Todos pequeños ingredientes que ayudan a que nos divirtamos. Me pasa estar escuchando lo que dice Leo o mirándolo y digo ‘qué bueno lo que está haciendo’, y eso está buenísimo. Con Leo además nos llevamos un año de diferencia y tuvimos una infancia fue muy cercana. Además, compartir horas con él, más allá de un almuerzo o una cena en familia, está bueno. Y si es trabajando de lo que nos gusta, mejor. 
Fotos: KVK Fotos
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