Vecinos, amigos, familia eligen como punto de encuentro el pequeño local de Rooibos. Cálido por donde lo mires y con espacios ambientados al estilo vintage, este lugar te da la bienvenida para disfrutar a toda hora: mañana, mediodía y tarde-noche.
Esta casa de té es para aquellos vecinos que eligen sumergirse en un ambiente de lo más apacible. Tras dejarse tentar por las delicias de la vidriera, la entrada sorprende con sus aromas a comida recién hecha, un pequeño living finamente decorado, 3 o 4 mesas hechas de pie de máquina de coser antigua, un estante cargado de libros de cocina de todo el mundo, y vajilla de antaño. Todo crea un ambiente acogedor y único, y cada detalle suma puntos. A esto sumarle una mesa comunal para unas ocho o diez personas ubicado en el entrepiso.
Los dueños decidieron hace aproximadamente dos años apostar en este barrio cercano al centro comercial de calle 12, para emprender su negocio gastronómico que funciona como lo soñaban. Y es que la carta del lugar es uno de los puntos fuertes de este lugar, casi escondido. La esencia de Rooibos es lo artesanal, y así lo demuestran sus pasteleros en sus tortas. Para dar testimonio hay que probar la espectacular Torta Rogel y la Torta bon bon (apta para celíacos). Para el desayuno o la merienda, también hay disponibles alfajores de maicena, alfajores de chocolate y nuez, muffins, torta de zanahoria y almendras, brownie, cheesecake de maracuyá, entre otras delicias.
La carta de infusiones de Rooibos sorprende con blends como té negro, canela, cardamomo, anís estrellado, vainilla y un toque cítrico; o el té negro, coco, chocolate y ananá. Para quienes buscan lo tradicional, siempre hay té blanco, té verde chino o japonés, té negro, té rojo. Por otro lado, en el lugar preparan aguas saborizadas (agua de yerba mate y cedrón, iría perfecto para la hora del té) y jugos naturales con frutas y verduras de estación, para quienes desean algo refrescante.
Para la hora del almuerzo, todos los días se elabora un menú especial, que pueden ser platos calientes como merluza o cazón con verduras asadas, o pollo marinado con ajo y jengibre acompañado por milhojas de verduras. Quienes lleguen a Rooibos siempre encontrarán tartas, ensaladas, hamburguesas de carne o pollo, bagels de salmón marinado y rúcula, wraps de pollo o langostinos con palta, rúcula, queso y tomates asados.
Con solo acercarse al mostrador y elegir por algunas de las opciones, en este lugar se puede aprovechar el servicio de take-away, y son muchos los vecinos que pasan diariamente para comer algo rico y artesanal en su casa o lugar de trabajo. De esta manera, Rooibos presenta un concepto diurno especializado en té, que establece una propuesta que se adapta a la zona y brinda a precios amigables la calidad gastronómica que lo distingue.
Rooibos
Cuándo: de lunes a sábado de 08.00 a 20.00
Dónde: Av. 60 #740 e/ 9 y 10 (La Plata)
En las redes: Facebook / Instagram
