Cuando hablamos de algo como una experiencia, ponemos en juego nuestros sentidos. Más allá de combinar ingredientes y saborear los alimentos, un encuentro gastronómico es siempre una oportunidad para observar, participar y vivir un momento. Esta es la premisa de La Cocina y Sus Sentidos, un pequeño restaurante que ofrece desde hace 16 años platos de comida de autor, donde la excelencia de sabores se completan con un ambiente de buen gusto para el disfrute.
Detrás de esta propuesta se encuentra Federico Vallina, quien abre las puertas de su local para quienes buscan vivir una experiencia con el ritual que significa la comida, sus olores, sus sabores, la música y la atención cordial. Al ingresar, Federico nos da la bienvenida. En el salón de una antigua casa reciclada nos encontramos con gr andes ventanales que combinan a la perfección con el mobiliario de madera, las sillas tapizadas en tela, y los cuadros de Pablo Motta. La iluminación es otro factor fundamental en la impronta del espacio de este restaurante: luces difusas y spots direccionados. Otro elemento distinguido dentro del restaurant es un pequeño patio interno que invita a disfrutar de un aperitivo para quienes deben esperar unos minutos para ocupar mesa. Y para coronar el ambiente, el delicado sonido de la música.
En La Cocina la carta siempre renueva. El menú se elige en base a ingredientes de estación y una excelente calidad, fusionado con las mejores y novedosas técnicas de cocción. En su carta invernal encontramos para comenzar: Sopa de calabaza, pesto de hongos de pino, crutons y cebolla seca; Carpaccio de lomo crudo con emulsión de extracto de tomate y aceto balsámico. Entre los platos elaborados aparecen las carnes: Colita de cuadril braseado, con puré de papa, verdeo salteado y maní; Pechito de cerdo braseada con tortilla de papa y mortadela y salsa barbacoa: Risotto y azafrán con ragú de carne; Lenguado a la plancha con causa peruana. Entre los platos de pastas encontramos Spaghetti verde salteados con rúcula fresca, hongos, tomates secos y pistachos; Canelones de espinaca, ricota y especies con salsa blanca y nuez moscada fresca; Agnolotis al horno rellenos de calabaza y brócoli asados, con crema de zanahoria y cherrys.
Después de ordenar el menú, una serie de entremeses gourmet para estimular el apetito. A la propuesta culinaria de La Cocina se le suma una cuidadosa selección de vinos que dan como resultado un maridaje perfecto para una experiencia gastronómica completa. Hay opciones para quienes eligen Malbec, Cabernet, Pinot Noir, Sauvignon Blanc, Torrontés, Rosado, Cosecha tardía y Espumantes. Por otro lado, en la barra se preparan aperitivos y espirituosos: Gin tonic, Punt e més, Cinzano con soda, Campari con naranja, Moscato, Whisky, entre las opciones.
En La Cocina, el encuentro gastronómico transcurre de maravillas con la cálida atención del personal de mesa y de su dueño. Para la hora del postre, opciones exquisitas como Ananá al horno, crema nuez y almíbar; Mousse de Maracuyá y ganache de chocolate; Mousse de chocolate con arándanos y naranja dulce.
Su vasta trayectoria en la cocina de autor ratifica la afirmación de que La Cocina es mucho más que un restaurante. En su propuesta todos los ingredientes se fusionan y todos los sentidos se ponen en juego. Es así como se materializa una verdadera experiencia gastronómica. 
La Cocina y Sus Sentidos
Dónde: Diagonal 77 n° 770 e/ 8 y 9, La Plata
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